Tras las pruebas realizadas en 2008 con la cámara de alta velocidad seguimos trabajando con la intención de mejorar la eficiencia en la entrega de la energía, para que se tradujera en un retroceso más suave, una mayor velocidad de salida de la flecha y una mejora en la precisión del arma.
Desde nuestro punto de vista, un fusil de pesca submarina debe de reunir una serie de condiciones para que sea adecuado al máximo de situaciones posibles que se dan en una jornada. Nosotros apostamos por encontrar un equilibrio entre las tres principales virtudes que debe reunir un arma adaptada a la pesca al acecho y espera: alcance, precisión y manejabilidad.
De nada sirve tener un fusil de largo alcance que no permite encarar rápidamente una pieza en acecho como un mero, o seguir un quiebro de un pez rápido como el dentón, o usar un arma demasiado potente cuya pobre precisión no permite alcanzar el pez en una zona dura o vital. En el resto de mares las especies equivalentes también necesitan de estas prestaciones, salvo en otro tipo de pesca como el BWH donde las piezas de gran tamaño permiten alinear un arma de escasa manejabilidad, y la punta zafable y las boyas de tracción pueden salvar una pieza impactada en una zona blanda.
Hemos optado tras probar varias medidas, realizar 3 modelos que según nuestro punto de vista cubren las expectativas de todo pescador de acecho o espera, uno para cada tipo de condiciones marinas y presas. Nuestro objetivo ha sido unir el máximo alcance y precisión, con un diseño y medidas que ofrezcan la mejor manejabilidad posible.
¿Que mejoras aportan las nuevas versiones respecto a las anteriores y a otros fusiles de la competencia?
En un fusil de gomas, la velocidad de salida de una flecha de masa ‘x’, viene condicionada por la fuerza de empuje de las gomas, y el recorrido durante el cual se aplica dicha fuerza.
Si aumentamos la fuerza de las gomas sin aumentar el recorrido (añadiendo gomas o aumentando su constante elástica k, sea por dureza Shore o por diámetro) el retroceso se vuelve más brusco, pues la mayor fuerza aplicada sobre la flecha en el mismo recorrido, hace que le entrega sea, para que nos entendamos, más explosiva. Además cada goma al contraer arrastra una cantidad de agua, que aumenta el retroceso por si misma, por lo tanto si aumentamos el numero de gomas aumentamos el retroceso por dos flancos.
El aumento del retroceso supone una perdida energética y de precisión importante, pudiendo llegar a ser contraproducente! Además la flecha tiene una velocidad máxima determinada por su forma, acabados y dimensiones, que podríamos decir que es inútil sobrepasar.
¡En ocasiones una mayor potencia puede llegar a implicar un menor alcance!
Partiendo de esta premisa, pensamos que la mejor manera de aumentar la velocidad de salida de la flecha es aumentar el recorrido de empuje de las gomas. Sin embargo, a mayor longitud de arma, menor maniobrabilidad….la otra opción valorada fue la del sistema rollergun, que permite un aprovechamiento máximo de la longitud del arma con una retroceso muy suave, sin embargo según nuestra experiencia presenta más desventajas que ventajas, sobretodo en la relación alcance-manejabilidad además de varias complicaciones mecánicas, y por tanto la opción se descartó.
¿Qué otras maneras teníamos de aumentar el recorrido de empuje de las gomas sin aumentar la longitud del arma y/o empeorar su manejabilidad?
En las versiones anteriores de nuestra marca ya se retrasaron los tetones o puntos de enganche de las gomas en la flecha, permitiendo un mayor aprovechamiento de la longitud total del arma para aumentar el estiramiento de las gomas. El tetón trasero se retrasó 2cm mientras que el intermedio ganó 14cm de distancia hasta el cabezal.
Lo mismo hicimos al aportar el cabezal en acero inoxidable, que consiente a misma longitud, 4cm más de longitud efectiva del arma, pues el punto de apoyo de la goma se adelanta a la parte extrema del fusil. Además montamos un sistema de obuses muy cortos, para no desperdiciar cm de estiramiento de goma.
También conseguimos un mayor recorrido de empuje disminuyendo el diámetro de las gomas. Una goma más fina se puede estirar con mayor facilidad, y se puede conseguir un recorrido de empuje manteniendo una fuerza de empuje inferior a la de una goma de mayor diámetro, lo que consiente una mayor energía potencial con una mayor suavidad en la entrega de la energía!
En las pruebas realizadas en las tres longitudes, el alcance y velocidad de la flecha es mayor con gomas de 16mm que con gomas de 18mm!!
En las nuevas versiones 2010 hemos optado por montar los fusiles con gomas Cressi de menor dureza shore para conseguir aun mas progresividad en la entrega, y aunque las gomas estiradas en proporciones que rondan el 350% se produce una perdida energética (histéresis) en el tiempo, los cm extras ganados en recorrido de empuje compensan dicha pérdida.
Pero la gran novedad de esta temporada es la adopción de un mecanismo de disparo invertido. Diseñado en colaboración con Jostexo Errondosoro, la suavidad es aun mayor que en anteriores versiones, y su recorrido inferior.
Con el actual plástico autolubricante utilizado en el gatillo su duración podríamos decir que es ilimitada. La pinza sujeta hilo es de liberación automática, y no interfiere en el rearme, consintiendo unos centímetros extras de nylon que une la varilla al arma.
Sin embargo la gran ventaja del nuevo mecanismo es que tiene la posición leva-gatillo invertida, lo que consiente que la flecha se posicione 8cm más atrás, aumentando en 8cm la longitud efectiva del arma sin aumentar su longitud total!
Esto significa que a misma longitud tendremos un fusil equivalente en alcance a uno 8cm más largo!
Gracias a la suma de estas varias modificaciones se ha aumentado mucho el recorrido de empuje de las gomas, permitiendo una notable mejora en prestaciones.
Actualmente el retroceso es más suave, la velocidad de salida de la flecha es mayor, y por lo tanto el alcance y la precisión han mejorado frente a anteriores versiones. Esta mejora en el retroceso junto con la posición de la empuñadura, nos ha permitido estilizar el arma, y restarle un poco de masa, dándole un espesor variable que decrece hacia la punta para atrasar el centro de masas, el cual está más cercano a la mano.
Al montar el mecanismo invertido a igual longitud efectiva, las dimensiones totales del arma se reducen 8cm.
Estas modificaciones se traducen en una mejora notable en la manejabilidad del arma. Por ejemplo el fusil Dentón 110 v.2010 tiene una manejabilidad lateral comparable o superior a un fusil estándar de 100cm, mientras que supera ligeramente el alcance del fusil dentón 110 v.2009! Esto es posible a la menor longitud y al factor forma que condiciona la hidrodinámica del arma. Para los incrédulos, esperamos publicar unas pruebas en piscina de nuestras armas contra fusiles de menor masa y sección, a quienes se les atribuye erróneamente una excelente manejabilidad.
Lo mismo ocurre con sus hermanos Dentón 120 y Róbalo 90, que tienen la manejabilidad de un fusil 8cm mas corto, mientras que el alcance es igual o superior a sus predecesores.
Esta mejora en la eficiencia energética nos hizo pensar la posibilidad de montar flechas de mayor masa y calibre, pero tras probar varias configuraciones optamos por la que demostró un mayor equilibrio entre velocidad, impacto y suavidad en el retroceso. (leer el apartado ‘menos es más’ sobre el alcance de un fusil submarino).
Otra de las modificaciones es un cambio en la posición de agarre del arma. El fusil monta una empuñadura anatómica en poliuretano de alta densidad como la versión 2009, acoplada al cuerpo mediante un tornillo de acero inoxidable y dos encajes en la pletina de acero que bloquean su rotación y permiten una unión sólida. Esta pletina hace su vez de guardamontes y se alarga hasta el apoyo de carga para reforzar el conjunto.
Sin embargo la unión empuñadura-cuerpo no tiene apenas ángulo permitiendo una posición natural de la mano y muñeca, y está unos milímetros mas alineada con el centro de masas para disminuir el retroceso secundario, que eleva la punta del arma durante el disparo, produciendo imprecisión, oscilación en la flecha y por tanto pérdida de alcance.
Otra de los cambios de la gama radica en la posibilidad de variar la flotabilidad del arma con suma facilidad.
En las nuevas versiones, el plomo que contrapesa el arma viene suelto en perdigones alojados en ambos extremos del arma, y es posible añadir o quitar peso solo desmontando las tapas que ahora cierran los alojamientos. En el cabezal sigue montando una plaquita de acero inoxidable, y en la empuñadura una tapa de goma atornillada, que cierran los orificios donde podremos añadir o quitar plomo al gusto del consumidor sin tener que hacer bricolage.
El carrete también ha sido modificado, para evitar que el hilo salga de la bobina al devanar, se han añadido dos rodillos que mantienen el hilo en su interior, sin interferir en su fricción. Seguimos apostando por un sistema de freno con desbloqueo automático, que da la seguridad de no perder el arma frente a un tirón brusco de la presa. Para aquellos pescadores que prefieran variar la fricción manualmente, solo tendrán que quitar una junta tórica para conseguir que el freno pueda ser ajustado al gusto del pescador.
El soporte donde va la bobina ha sido modificado y se ha eliminado la anterior soldadura del eje para dar robustez al conjunto. Ahora va atornillado a la pletina lo que hace que sea muy sólido.Tras las pruebas realizadas en 2008 con la cámara de alta velocidad seguimos trabajando con la intención de mejorar la eficiencia en la entrega de la energía, para que se tradujera en un retroceso más suave, una mayor velocidad de salida de la flecha y una mejora en la precisión del arma.
Desde nuestro punto de vista, un fusil de pesca submarina debe de reunir una serie de condiciones para que sea adecuado al máximo de situaciones posibles que se dan en una jornada. Nosotros apostamos por encontrar un equilibrio entre las tres principales virtudes que debe reunir un arma adaptada a la pesca al acecho y espera: alcance, precisión y manejabilidad.
De nada sirve tener un fusil de largo alcance que no permite encarar rápidamente una pieza en acecho como un mero, o seguir un quiebro de un pez rápido como el dentón, o usar un arma demasiado potente cuya pobre precisión no permite alcanzar el pez en una zona dura o vital. En el resto de mares las especies equivalentes también necesitan de estas prestaciones, salvo en otro tipo de pesca como el BWH donde las piezas de gran tamaño permiten alinear un arma de escasa manejabilidad, y la punta zafable y las boyas de tracción pueden salvar una pieza impactada en una zona blanda.
Hemos optado tras probar varias medidas, realizar 3 modelos que según nuestro punto de vista cubren las expectativas de todo pescador de acecho o espera, uno para cada tipo de condiciones marinas y presas. Nuestro objetivo ha sido unir el máximo alcance y precisión, con un diseño y medidas que ofrezcan la mejor manejabilidad posible.
¿Que mejoras aportan las nuevas versiones respecto a las anteriores y a otros fusiles de la competencia?
En un fusil de gomas, la velocidad de salida de una flecha de masa ‘x’, viene condicionada por la fuerza de empuje de las gomas, y el recorrido durante el cual se aplica dicha fuerza.
Si aumentamos la fuerza de las gomas sin aumentar el recorrido (añadiendo gomas o aumentando su constante elástica k, sea por dureza Shore o por diámetro) el retroceso se vuelve más brusco, pues la mayor fuerza aplicada sobre la flecha en el mismo recorrido da una aceleracion mayor ‘a=F/m’ , hace que le entrega sea, para que nos entendamos, más explosiva.
El aumento del retroceso supone una perdida energética y de precisión importante, pudiendo llegar a ser contraproducente! Además la flecha tiene una velocidad máxima determinada por su forma, acabados y dimensiones, que podríamos decir que es inútil sobrepasar.
¡En ocasiones una mayor potencia puede llegar a implicar un menor alcance!
Partiendo de esta premisa, pensamos que la mejor manera de aumentar la velocidad de salida de la flecha es aumentar el recorrido de empuje de las gomas. Sin embargo, a mayor longitud de arma, menor maniobrabilidad….la otra opción valorada fue la del sistema rollergun, que permite un aprovechamiento máximo de la longitud del arma con una retroceso muy suave, sin embargo según nuestra experiencia presenta más desventajas que ventajas, sobretodo en la relación alcance-manejabilidad además de varias complicaciones mecánicas, y por tanto la opción se descartó.
¿Qué otras maneras teníamos de aumentar el recorrido de empuje de las gomas sin aumentar la longitud del arma y/o empeorar su manejabilidad?
En las versiones anteriores de nuestra marca ya se retrasaron los tetones o puntos de enganche de las gomas en la flecha, permitiendo un mayor aprovechamiento de la longitud total del arma para aumentar el estiramiento de las gomas. El tetón trasero se retrasó 2cm mientras que el intermedio ganó 14cm de distancia hasta el cabezal.
Lo mismo hicimos al aportar el cabezal en acero inoxidable, que consiente a misma longitud, 4cm más de longitud efectiva del arma, pues el punto de apoyo de la goma se adelanta a la parte extrema del fusil. Además montamos un sistema de obuses muy cortos, para no desperdiciar cm de estiramiento de goma.
También conseguimos un mayor recorrido de empuje disminuyendo el diámetro de las gomas. Una goma más fina se puede estirar con mayor facilidad, y se puede conseguir un recorrido de empuje manteniendo una fuerza de empuje inferior a la de una goma de mayor diámetro, lo que consiente una mayor energía potencial con una mayor suavidad en la entrega de la energía!
En las pruebas realizadas en las tres longitudes, el alcance y velocidad de la flecha es mayor con gomas de 16mm que con gomas de 18mm!!
En las nuevas versiones 2010 hemos optado por montar los fusiles con gomas Cressi de menor dureza shore para conseguir aun mas progresividad en la entrega, y aunque las gomas estiradas en proporciones que rondan el 350% se produce una perdida energética (histéresis) en el tiempo, los cm extras ganados en recorrido de empuje compensan dicha pérdida.
Pero la gran novedad de esta temporada es la adopción de un mecanismo de disparo invertido. Diseñado en colaboración con Jostexo Errondosoro, la suavidad es aun mayor que en anteriores versiones, y su recorrido inferior.
Con el actual plástico autolubricante utilizado en el gatillo su duración podríamos decir que es ilimitada. La pinza sujeta hilo es de liberación automática, y no interfiere en el rearme, consintiendo unos centímetros extras de nylon que une la varilla al arma.
Sin embargo la gran ventaja del nuevo mecanismo es que tiene la posición leva-gatillo invertida, lo que consiente que la flecha se posicione 8cm más atrás, aumentando en 8cm la longitud efectiva del arma sin aumentar su longitud total!
Esto significa que a misma longitud tendremos un fusil equivalente en alcance a uno 8cm más largo!
Gracias a la suma de estas varias modificaciones se ha aumentado mucho el recorrido de empuje de las gomas, permitiendo una notable mejora en prestaciones.
Actualmente el retroceso es más suave, la velocidad de salida de la flecha es mayor, y por lo tanto el alcance y la precisión han mejorado frente a anteriores versiones. Esta mejora en el retroceso junto con la posición de la empuñadura, nos ha permitido estilizar el arma, y restarle un poco de masa, dándole un espesor variable que decrece hacia la punta para atrasar el centro de masas, el cual está más cercano a la mano.
Al montar el mecanismo invertido a igual longitud efectiva, las dimensiones totales del arma se reducen 8cm.
Estas modificaciones se traducen en una mejora notable en la manejabilidad del arma. Por ejemplo el fusil Dentón 110 v.2010 tiene una manejabilidad lateral comparable o superior a un fusil estándar de 100cm, mientras que supera ligeramente el alcance del fusil dentón 110 v.2009! Esto es posible a la menor longitud y al factor forma que condiciona la hidrodinámica del arma. Para los incrédulos, esperamos publicar unas pruebas en piscina de nuestras armas contra fusiles de menor masa y sección, a quienes se les atribuye erróneamente una excelente manejabilidad.
Lo mismo ocurre con sus hermanos Dentón 120 y Róbalo 90, que tienen la manejabilidad de un fusil 8cm mas corto, mientras que el alcance es igual o superior a sus predecesores.
Esta mejora en la eficiencia energética nos hizo pensar la posibilidad de montar flechas de mayor masa y calibre, pero tras probar varias configuraciones optamos por la que demostró un mayor equilibrio entre velocidad, impacto y suavidad en el retroceso. (leer el apartado ‘menos es más’ sobre el alcance de un fusil submarino).
Otra de las modificaciones es un cambio en la posición de agarre del arma. El fusil monta una empuñadura anatómica en poliuretano de alta densidad como la versión 2009, acoplada al cuerpo mediante un tornillo de acero inoxidable y dos encajes en la pletina de acero que bloquean su rotación y permiten una unión sólida. Esta pletina hace su vez de guardamontes y se alarga hasta el apoyo de carga para reforzar el conjunto.
Sin embargo la unión empuñadura-cuerpo no tiene apenas ángulo permitiendo una posición natural de la mano y muñeca, y está unos milímetros mas alineada con el centro de masas para disminuir el retroceso secundario, que eleva la punta del arma durante el disparo, produciendo imprecisión, oscilación en la flecha y por tanto pérdida de alcance.
Otra de los cambios de la gama radica en la posibilidad de variar la flotabilidad del arma con suma facilidad.
En las nuevas versiones, el plomo que contrapesa el arma viene suelto en perdigones alojados en ambos extremos del arma, y es posible añadir o quitar peso solo desmontando las tapas que ahora cierran los alojamientos. En el cabezal sigue montando una plaquita de acero inoxidable, y en la empuñadura una tapa de goma atornillada, que cierran los orificios donde podremos añadir o quitar plomo al gusto del consumidor sin tener que hacer bricolage.
El carrete también ha sido modificado, para evitar que el hilo salga de la bobina al devanar, se han añadido dos rodillos que mantienen el hilo en su interior, sin interferir en su fricción. Seguimos apostando por un sistema de freno con desbloqueo automático, que da la seguridad de no perder el arma frente a un tirón brusco de la presa. Para aquellos pescadores que prefieran variar la fricción manualmente, solo tendrán que quitar una junta tórica para conseguir que el freno pueda ser ajustado al gusto del pescador.
El soporte donde va la bobina ha sido modificado y se ha eliminado la anterior soldadura del eje para dar robustez al conjunto. Ahora va atornillado a la pletina lo que hace que sea muy sólido.